Telemedicina: lo que viaja es la información, no el paciente
Desde la perspectiva de los últimos diez años, resulta realmente notable la mejora que se ha producido en la calidad de los servicios de salud pública ofrecidos a la población brasileña, como es el caso de la ampliación del acceso a los sectores excluidos, es decir, la extensión de las políticas y los programas que garantizan, entre otras cuestiones, el acceso de la población a los medicamentos genéricos.
Más de 200 millones de habitantes, un territorio de dimensiones continentales y una realidad compleja, con grandes diferencias sociales y económicas. Debido a estas características, Brasil es uno de los países que posee uno de los mayores sistemas públicos de salud en cobertura poblacional. Se trata de un gran desafío, ¿no es verdad? En 1988 se creó en el país el Sistema Único de Salud (SUS), iniciativa reconocida por los ciudadanos como una de las reformas sociales más exitosas por su carácter universal e igualitario.
Imaginen ahora los beneficios que podrían sumarse a este amplio sistema de salud mediante la implementación de una herramienta capaz de modernizar el sector de la salud en el país, permitiendo al mismo tiempo reducir los gastos y ampliar el acceso a la salud, aumentando la calidad de la atención que se presta a los ciudadanos.
Telemedicina. Esta es la herramienta que emplea avanzados recursos tecnológicos para gestionar las imágenes médicas, la comunicación de diagnósticos, la telerrehabilitación, el almacenamiento de datos de los pacientes y su historial clínico, entre otras muchas cosas. La adopción de la telemedicina tiende a ampliar los servicios de salud en las situaciones en que la distancia es un factor crítico, además de promover, entre otros beneficios, el acceso a especialistas y a centros de diagnóstico a los que una persona no tendría acceso por el hecho de encontrarse a mucha distancia de dichos recursos o bien por pertenecer a una comunidad carenciada.
Concretamente, tecnologías como la telemedicina contribuyen a lograr una mejor calidad asistencial para todas las personas, en cualquier lugar y en cualquier momento, haciendo posible que los pacientes lleven una vida normal sin pérdida de calidad en los servicios prestados. En el caso de Brasil, cuyas regiones tienen características tan distintas, la telemedicina posibilita que un paciente de una zona rural remota pueda tener acceso a avanzados recursos médicos propios de los grandes núcleos urbanos. Con la adopción de la telemedicina, los distintos agentes, tales como hospitales, pacientes y profesionales comparten información, diagnósticos y servicios.
Hay muchos ejemplos que ponen de manifiesto el éxito que supone la adopción de la telemedicina. Actualmente, se está desarrollando el proyecto denominado "SAHEL" ("Satellite African eHealth validation”) para llevar los servicios de telemedicina al África subsahariana, con el objetivo de apoyar la implementación y la posterior extensión de servicios de telemedicina económicamente viables en África a través del uso integrado de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y de la tecnología satelital.
Otro caso de éxito es el proyecto de P&D desarrollado en Andalucía, España, para facilitar a los pacientes crónicos el acceso online y seguro de su historial clínico mediante la implantación generalizada de servicios de telemedicina. De esta manera, PALANTE (Patient Leading and Mananaging Their Healthcare Through e-Health) pretende ayudar a los pacientes a desempeñar una función más activa en el cuidado de su propia salud, conjuntamente con el equipo médico que los atiende, mediante el uso de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación.
Además de favorecer el acceso a los recursos médicos por parte de los pacientes, la telemedicina también permite el intercambio de datos y el aprendizaje entre profesionales de la salud, eliminando las barreras que supone la distancia. Apoyada mediante avanzados recursos tecnológicos, el año pasado se transmitió en vivo desde España una sesión de cirugía de la rodilla utilizando una técnica pionera a cerca de 300 universidades y hospitales de los cinco continentes con el objeto de formar profesionales en el dominio de esta nueva técnica. Esta Master Class permitirá el uso de esta técnica quirúrgica en nuevo ámbitos y en zonas de escasos recursos: centros de salud, ambulatorios, zonas rurales, hospitales de compaña en misiones de paz y clínicas veterinarias.
De esta manera, vemos que la telemedicina aparece como una herramienta significativa para superar las barreras culturales, socioeconómicas y geográficas para los servicios y la información en el ámbito de la salud en centros urbanos remotos y comunidades carenciadas.
Además, su aplicación contribuye en gran medida a aprovechar mejor los recursos ya disponibles en la red pública de salud, optimizando la atención, la programación de consultas y exámenes, la utilización de las camas de hospital, reduciendo las colas de espera para recibir atención y garantizando a los ciudadanos el acceso a los mejores recursos sanitarios.