Como hemos visto en anteriores entradas, actualmente los gigantes tecnológicos están apostando con fuerza por la Inteligencia Artificial. A continuación vamos a dar algunos datos de mercado que justifican estos movimientos.

A comienzos del presente año Scale Venture Partners predijo que en 2016 las aplicaciones de negocio se volverán más inteligentes con el aprendizaje automático.

IDC, por su parte, va más lejos en sus predicciones, indicando que en 2020 el mercado de aplicaciones de machine learning alcanzará los 40 mil millones de dólares y el 60% de esas aplicaciones se ejecutarán en el software de la plataforma de cuatro empresas: Amazon, IBM, Google y Microsoft.

Esta consultora también estima que para el año 2018 al menos el 50 por ciento de los desarrolladores incluirá características de Inteligencia Artificial en sus productos. Así mismo observan que a medida que la inteligencia artificial se vuelva cada vez más “mainstream”, las empresas que sean capaces de utilizar esta tecnología de forma más creativa para mejorar la experiencia del usuario obtendrán ventajas competitivas.

Por ello tanto Facebook como Google están trabajando activamente para lograr este objetivo. Por ejemplo, Google está abriendo su tecnología de inteligencia artificial para los desarrolladores externos. Esto hará que la tecnología más sea accesible y ampliamente disponible, aumentando así su capacidad de adaptación. Google cree que las aplicaciones de software inteligentes pronto se convertirán en algo común y el aprendizaje automático se aplicará en todas los sectores. Otras grandes compañías también están trabajando en esa línea. Por ejemplo, IBM ya ofrece más de 30 API de Watson, los componentes que los desarrolladores utilizan para construir sus aplicaciones.

Por otra parte, IDC prevé que en el periodo 2015-2020 los sistemas inteligentes habrán crecido un 7,2 %. Ese crecimiento implica que, dentro de cuatro años, sus ingresos rebasarán ya los 2,2 mil millones de dólares. En este análisis IDC destaca la aplicación de sistemas inteligentes a fenómenos tan pujantes como los wearables, las impresoras 3D o los drones. Otros componentes del área de sistemas inteligentes que tendrán mucho que decir son los sistemas avanzados de ayuda a la conducción y las soluciones de entretenimiento para el automóvil, la telemática en el transporte, la videovigilancia y los hogares y los edificios inteligentes.

En su informe “New IDC Spending Guide”, la consultora vaticina que el gasto mundial en sistemas cognitivos en 2019 será de 31.300 millones de dólares. De ellos, dos quintas partes procederán de la parte del software (aplicaciones, con casi 13.400 millones).

Respecto a la utilización de este tipo de sistemas en el ámbito empresarial, Deloitte Global predice que más de 80% de las 100 mayores empresas desarrolladoras de SW empresarial del mundo tendrán integradas tecnologías cognitivas (aprendizaje automático, procesamiento del lenguaje natural y reconocimiento de voz principalmente) en sus productos a lo largo de 2016 (25% más que en 2015), y que en 2020 serán alrededor del 95%.

Principales aplicaciones de la Inteligencia Artificial en el mercado

A continuación se analizan las principales aplicaciones de la Inteligencia Artificial que, de acuerdo con Forbes, impactarán tanto en la vida de los consumidores, como en las empresas en un futuro próximo:

- Redes sociales: las plataformas sociales en todos los ámbitos están apostando por la Inteligencia Artificial y el aprendizaje automático para mejorar la experiencia del usuario. Facebook se ha centrado en el filtrado y personalización de fuentes de noticias, identificando qué es lo que el usuario quieren ver, y con qué contenidos estará más propenso a participar, comentar y compartir. El gigante de las redes sociales también está trabajando en el reconocimiento de voz e imagen en los contenidos.

- Asistentes digitales: los asistentes digitales del futuro (por ejemplo, nuevas generaciones de Siri, Alexa, M de Facebook, Google Assistant, o incluso Viv), ayudarán a conectar, organizar y automatizar casi todas las áreas de la vida, desde la gestión de la atención médica y las finanzas hasta la reserva de viajes y la programación de agendas y calendarios. Estas interfaces conversacionales, impulsadas por enormes cantidades de datos, aplicarán potentes capacidades de Inteligencia Artificial para mejorar nuestras vidas, por ejemplo mediante la automatización de las tareas rutinarias.

- Vehículos autónomos: la fantasía futurista de los coches auto-conducidos han llegado. Google ha estado probando su flota durante varios años. Ahora Uber está haciendo lo mismo con su flota en Pittsburgh. Y Ford está trabajando en vehículo autónomo que no tienen volante, ni pedales. Las implicaciones para los consumidores (importantes reducciones en los accidentes y consecuentemente en los costes de seguros) y la industria (remodelación de la industria del transporte) son enormes.

- Atención al cliente: hacer reaccionar rápidamente ante, o incluso predecir, un problema del cliente es absolutamente crucial actualmente para las empresas. Algoritmos de aprendizaje automático aplicados a cantidades masivas de datos digitales, sociales y empresariales están permitiendo encontrar patrones e identificar problemas tanto actuales como potenciales.

- Marketing: los algoritmos predictivos se utilizan para casi todo actualmente. Del mismo modo que ayudan a Netflix a decidir qué contenidos recomendar, las herramientas de Inteligencia Artificial pueden ayudar a las empresas a hacer lo mismo para los consumidores, además de personalizar el contenido y predecir recomendaciones para construir relaciones más fuertes y leales entre empresas y clientes.

- Recursos humanos: el gasto del sector de RRHH en tecnología aumentará 46% este año respecto al año pasado. Irónicamente, las máquinas ayudarán a que las funciones de RRHH se perciban como más humanas y personalizadas, desde la contratación hasta el compromiso del empleado y la educación. Por ejemplo, en la competición por la captación de talento, la Inteligencia Artificial puede ayudar a identificar a posibles candidatos, a gran escala y con una elevada precisión y velocidad. Por otra parte, las aplicaciones basadas en Inteligencia Artificial pueden automatizar el laborioso proceso de programación de las entrevistas y reuniones. Pueden, así mismo, identificar las fortalezas y debilidades de los empleados para crear mejores y más personalizadas oportunidades de formación y desarrollo. Además, el análisis continuo de los datos puede ayudar a identificar patrones de contratación y de participación de los empleados, a descubrir tendencias en días de enfermedad y tasas de rotación, etc.

Los datos expuestos muestran como, junto con los mercados de Realidad Virtual y Realidad aumentada, el de Inteligencia Artificial, es uno de los mercados tecnológicos más activos y con mayores expectativas de crecimiento en los próximos años.