Heisenberg decía que lo que nosotros observamos no es la naturaleza misma, sino la naturaleza expuesta a nuestro “método de interrogación”, y Husserl, que el mundo lleva impresa la marca de nuestra propia estructura.

O, lo que es lo mismo, que vemos lo que estamos preparados/condicionados/predispuestos a ver. Y ese “método de interrogación” es el resultado de nuestro aprendizaje- condicionamiento-experiencia = (igual, en muchas ocasiones) a costra-patrón-mutilación.

Esto a veces es bueno, ya que nos ayuda a tomar decisiones rápidas en base a nuestra experiencia, pero a veces no lo es, ya que nos hace imposible ver la realidad cambiante y actuar sobre ella.

Estos tiempos de flujos de personas/mercados/geografías, de prisa en el ROI, de preocupación por el ROE, de buscar que el coste sea una variable de los resultados de negocio, de innovar en productos, servicios y modelos de negocio, convierten este “cambio en el método de interrogación” en un desafío, en una necesidad, en la única vía posible para ver el mundo con ojos nuevos.

¿Podemos cambiar nuestro método de interrogación?, ¿podemos cambiar nuestra propia estructura?, ¿podemos generar suficiente energía como para romper nuestros patrones y ver más allá de ellos?

Yo pienso que sí.

Si quieres saber más sobre “creatividad en tiempos revueltos” ven a mi charla en el Salón Internacional de Tecnología (SITE 2010), que se celebrará en La Coruña los próximos 17 y 18 de Noviembre. Espero verte allí!