- La exigente regulación de protección de datos e identidad digital de la UE brinda la oportunidad a las empresas europeas de distinguirse como las mejor preparadas para ofrecer los servicios de mayor valor en la economía digital
- La gestión de la identidad es el factor clave de una transacción digital, pero también la palanca de transformación que permite a la empresa redefinir su oferta y encontrar nuevas líneas de negocio
- Minsait es la unidad de negocio de Indra que da respuesta a los retos que la transformación digital plantea a empresas e instituciones
La exigente regulación europea de protección de datos que entrará en vigor el próximo año plantea importantes retos tecnológicos, pero podría convertir a las empresas del continente en las que gestionan de forma más eficiente y segura la identidad digital de sus clientes, lo que les llevará a ser más competitivas y ofrecer los servicios de mayor valor en la economía digital.
Así lo ha afirmado la responsable de tecnologías de Ciberseguridad de Minsait, Isabel González Hervás, en su intervención en el foro Digital Enterprise Show que se celebra en Madrid estos días. González Hervás señaló que “la gestión de la identidad se encuentra en la base de cualquier transacción digital” y añadió que “representa además una palanca de transformación esencial para el negocio, ya que permite redefinir la oferta, crear nuevas líneas de ingresos y generar valor”.
La nueva Regulación General de Protección de Datos (GDPR) eleva los requisitos de privacidad y seguridad en el tratamiento de los datos de ciudadanos europeos: entre otros aspectos, exige su consentimiento expreso para que puedan tratarse y protege el derecho de olvido y de acceso y eliminación de los mismos. También establece la obligación de las empresas de notificar los incidentes de ciberseguridad que afecten a la privacidad y establece distintas sanciones.
Cumplir con este reglamento está obligando a las empresas europeas a llevar a cabo una profunda modernización tecnológica. Ya no es posible abordar el tratamiento de los datos de forma aislada, a través de aplicaciones diferentes, y se impone la necesidad de dar un salto cualitativo y poner en operación plataformas que centralicen su tratamiento en tiempo real, sin importar el canal desde el que se conecte el usuario.
Es necesario que la empresa disponga de sistemas que proporcionan una visión de 360º de los datos que maneja. Solo así podrán facilitar el acceso para que se puedan modificar.
Todas estas mejoras y esfuerzo ofrecen como contrapartida la posibilidad de que las empresas europeas adelanten a sus competidores en lo que a gestión eficiente de identidad digital se refiere. Este proceso es clave para que puedan identificar a sus clientes de forma rigurosa en un entorno digital y tengan garantías de que las transacciones comerciales que lleven a cabo son seguras. Pero al mismo tiempo, este procedimiento debe cuidar que la experiencia que tiene el usuario sea flexible y cómoda.
La capacidad para conjugar ambas necesidades marca la diferencia entre unas empresas y otras en el entorno digital y establece su capacidad para llevar a cabo operaciones de más o menos importe.
La responsable de Minsait explicó que todas las iniciativas que buscan mejorar la gestión de la identidad digital persiguen “crecer en el valor de la transacción y nivel de garantía. Sin embargo, aquellas compañías que en un primer momento apostaron por un bajo nivel de seguridad para mejorar la experiencia de uso encontrarán ahora difícil adaptarse y ofrecer los servicios críticos de más valor”.
En su presentación, la responsable de Minsait explicó que la regulación europea y las capacidades tecnológicas necesarias para cumplirla sitúan a las empresas del continente en una inmejorable posición para aprovechar el abanico de posibilidades de negocio que abre la identidad digital.
Esta capacidad permitirá, por ejemplo, comprar un vehículo online con un solo click, contratando simultáneamente un crédito, el seguro y realizando de forma inmediata el pago al concesionario. También permitirá que un viajero se identifique biométricamente para completar el check-in y acceder a su vuelo de forma rápida. La contratación automática de fondos de inversión mediante un selfie, la apertura de forma ágil y rápida de una cuenta bancaria o incluso la posibilidad de que el vehículo reconozca al conductor para abrirle la puerta o para realizar gestiones con el seguro en caso de accidente sin su intervención son otras posibilidades que ofrece la gestión de la identidad digital.
Acerca de Minsait
Minsait es la unidad de negocio de Indra que da respuesta a los retos que la transformación digital plantea a empresas e instituciones, por medio de la oferta de resultados inmediatos y tangibles. Indra ha agrupado en Minsait su cartera de soluciones de tecnología y consultoría en el negocio digital, que le han convertido en una de las empresas líderes de este mercado en España. Y la ha impulsado con una metodología diferencial, una ampliada cartera de soluciones de negocio, un modelo propio y diferente de venta, entrega y soporte orientado a la generación de impacto, y una organización flexible basada en equipos multidisciplinares, formados por especialistas de perfiles muy concretos. Minsait completa la oferta del resto de verticales de alto valor de Indra, favoreciendo su orientación hacia los negocios clave de sus clientes, y con ello será un motor para acelerar el crecimiento de Indra.
Acerca de Indra
Indra es una de las principales empresas globales de consultoría y tecnología y el socio tecnológico para las operaciones clave de los negocios de sus clientes en todo el mundo. Dispone de una oferta integral de soluciones propias y servicios avanzados y de alto valor añadido en tecnología, que combina con una cultura única de fiabilidad, flexibilidad y adaptación a las necesidades de sus clientes. Indra es líder mundial en el desarrollo de soluciones tecnológicas integrales en campos como Defensa y Seguridad; Transporte y Tráfico; Energía e Industria; Telecomunicaciones y Media; Servicios financieros; y Administraciones públicas y Sanidad. A través de su unidad Minsait, Indra da respuesta a los retos que plantea la transformación digital. En el ejercicio 2016 tuvo ingresos de 2.709 millones de euros, 34.000 empleados, presencia local en 46 países y operaciones comerciales en más de 140 países.